lunes, 19 de octubre de 2015

V RECREACIÓN HISTÓRICA DEL SITIO DE TARIFA DE 1812.

Palabras pronunciadas por Jesús Núñez el 17 de octubre de 2015 en el acto institucional de bienvenida y presentación de las diferentes asociaciones y grupos de recreación histórica, que tuvo lugar en la Calle Sancho IV "El Bravo", ante la fachada de la Iglesia Mayor de San Mateo, en Tarifa (Cádiz):

Excmo. Sr. Delegado del Gobierno de España en Andalucía, Ilmo. Sr. Alcalde de la Muy Noble, Muy Leal y Heroica Ciudad de Tarifa, Excelentísimas e Ilustrísimas autoridades civiles y militares, Pueblo de Tarifa, españoles y extranjeros, señoras y señores, amigos todos:

Quiero comenzar estas breves palabras agradeciendo a nuestro Alcalde y a todo el Pueblo de Tarifa cuya representación ostenta con orgullo en esta histórica jornada conmemorativa, como Coronel Jefe de la Guardia Civil del Campo de Gibraltar, que se haya acordado de nuestro Benemérito Cuerpo para encabezar este homenaje, pues toda recreación histórica constituye un homenaje, a los hombres y mujeres que hace dos siglos dieron su vida por dos de los valores más importantes: la Patria, ¡España!, y la Libertad.

La Guardia Civil no pudo entonces participar en la defensa de Tarifa porque hasta el año 1844 no sería creada de la mano del II Duque de Ahumada bajo el Reinado de Isabel II.

Pero si ya hubiese existido, que nadie dude que los beneméritos componentes de nuestro Cuerpo, que tiene el Honor como principal Divisa, habrían acudido prestos a combatir y defender la Ciudad de Tarifa bajo las órdenes del Mariscal de Campo Francisco de Oliver Copons y Méndez de Navia, militar español de origen malagueño.

Y sin duda alguna también, la sangre de los guardias civiles se hubiera derramado como se derramó la de tantos españoles y extranjeros que dieron su vida en el cumplimiento del deber, por que la Guardia Civil muere pero no se rinde.

No pudo tener Tarifa mejor Jefe Militar para liderar las tropas que la defendieron entre la mañana del 20 de diciembre de 1811 y la madrugada del 5 de enero de 1812.

Prueba de ello es que el 23 de diciembre de 1815, por acuerdo plenario de su Ayuntamiento fue propuesto a S.M el Rey, con carácter honorífico, como Regidor Perpetuo de la Ciudad.

Su firme voluntad quedó registrada en los anales de la Historia de Tarifa y de España cuando el 16 de diciembre de 1811 escribió a su superior, el Teniente General Antonio Malet:

Excmo. Sr. = A las honras que merezco del Gobierno y de V.E. no queda más a mi obediencia que sacrificarme por el soberano y la Nación hasta el último extremo en esta plaza.”

Cerrado el cerco a Tarifa el 20 de diciembre e iniciado el asedio, los soldados españoles e ingleses, apoyados por el Pueblo de Tarifa, resistieron tenaz y heroicamente durante los nueve días siguientes.

El 29 por la tarde las tropas francesas consiguieron abrir una brecha de 18 metros en la muralla del Retiro por lo que al día siguiente el General de División Jean François Leval, que mandaba las fuerzas atacantes intimó la rendición a nuestro heroico mariscal de campo. Y éste, con la hidalguía propia de los caballeros militares españoles le contestó lo siguiente:

Señor general Leval = Sin duda ignorará V. S. que me hallo yo en esta plaza, cuando propone a su gobernador que admita una capitulación por hallarse la brecha próxima a ser practicable; cuando lo esté, a la cabeza de mis tropas en ella para defenderla me encontrará V.S. y entonces hablaremos. Quedo a su disposición de V.S. en la plaza de Tarifa a 30 de diciembre de 1811, a las dos y cuarto de la tarde. Sírvase V.S. omitir en lo sucesivo parlamentos”.

A la mañana siguiente, 31 de diciembre, siendo las nueve y media de la mañana atacaron la brecha abierta 23 compañías de granaderos y cazadores, apoyados por ocho mil efectivos al mando del general francés Chassereaux.

El ataque duró hasta las once del día sin que las tropas francesas pudieran alcanzar su objetivo, dejando numerosos muertos y heridos, gracias a la tenaz y heroica resistencia de los defensores.

Los sucesivos intentos llevados a cabo por los atacantes obtuvieron idéntico resultado. Así, una y otra vez, hasta la noche del 4 al 5 de enero de 1812, en la que cesaron en su sitio a la Ciudad de Tarifa y se retiraron, dejando abandonados cuatro cañones de a 16, tres de a 12 y dos obuses de a 9 pulgadas.

Y como tantas veces ha ocurrido a lo largo de la Historia, nuestra causa de Libertad gozó del apoyo sobrenatural, pues implorada la protección de Nuestra Señora la Virgen de la Luz, Patrona de Tarifa, la lluvia que cayó durante todo el asedio anegó los campamentos y posiciones francesas, contribuyendo con ello a nuestra Victoria.

Hoy conmemoramos tan histórica hazaña y quienes antaño estuvimos enfrentados hoy somos amigos y aliados, defendiendo los valores de Paz y Libertad en un momento donde ambos vuelven a ser cuestionados por terceros.

Frente a ellos, siempre estará el mismo espíritu que entonces imperó en la defensa de Tarifa y de España, y ahora con mucha más fuerza por que todos somos Amigos y Aliados dispuestos a seguir defendiendo los valores occidentales de Paz y Libertad.

Y para finalizar les pido que griten conmigo: ¡Viva Tarifa!, ¡Viva España!


Muchas gracias.